Hace días que llevaba pensando en un bizcocho esponjoso pero me apetecía probar con algún sabor nuevo y pensé ¿Y si probamos a hacerlo con té, a ver que sale? Así  salieron estos bizcochitos con Earl Grey que quedaron realmente delicioso, muy esponjosos y tiernos. Dentro llevan pasas y almendras que los hacen aún más irresistibles ¡Volaron! Ya estoy pensando cuándo hacer la siguiente tanda.

Ingredientes:

• 3 sobres grandes de té (Unos 15 g) Usé Earl Grey pero con Chai, té negro normal o té verde seguro que quedan genial.
• 150 ml de agua
• 2 huevos
• Edulcorante al gusto
• 130 g de harina integral de espelta (o la que prefiráis)
• 1 cucharita de levadura química
• 2 cucharadas de aceite (coco u oliva)
• 30 g de pasas
• 20 g de almendras

Primero preparamos el té de la siguiente forma; hervimos el agua y medimos 150 ml en un recipiente, añadimos las bolsas de té, tapamos y dejamos reposar 5 minutos. Pasado ese tiempo sacamos las bolsitas, y exprimimos bien el agua de éstas.
Precalentamos el horno a 180°
A continuación separamos las claras de las yemas, y las ponemos en dos cuencos diferentes. Batimos las claras hasta que queden a punto de nieve. Por otro lado batimos las yemas con el edulcorante, y cuando empiece a adquirir un color algo más blanquecino añadimos el aceite, removemos y a continuación añadimos el té (que esté templado) sin parar de remover para incorporarlo bien con las yemas.
Con ayuda de una cuchara o espátula mezclamos la harina más la levadura con esta mezcla y cuando esté bien integrado es el momento de añadir las claras; primero pondremos un poco, como 1/3 del total, y removemos bien (esto ayudará a integrar el resto de claras mejor) y después el resto de claras pero removiendo suavemente, con movimientos envolventes y cuidado para que no se bajen y pierdan esponjosidad.
Finalmente añadimos las pasas y almendras troceadas, removemos suavemente y ya podemos rellenar nuestros moldes, pueden ser como estos, de muffins o similar o hacer un solo bizcocho grande.
Una vez que lo tengamos en el molde os recomiendo con unos palillos sin punta (para no dañar el molde) pasar por el fondo del molde para quitar posibles burbujas, yo no lo hice por impaciente y quedaron con huecos, que no afecta al sabor pero quedan más bonitos sin 🙂
Hornear 20 minutos si son pequeños y unos 40 si es un solo bizcocho.

Los primeros nos los comimos calentitos porque no podíamos esperar y nos costó parar ¡Teníamos que dejarlos para desayunar y al final no iba a llegar ni uno!
Quedaron tiernos y esponjosos tanto fríos como calientes, y tienen un rico sabor a té que junto con las pasas y las almendras hacen que sean una maravilla totalmente saludable y fácil de preparar.
Si lo hacéis me encantaría que me lo hicierais saber, podeís hacerlo a través de aquí, Instagram, Facebook o Twitter, y si tenéis preguntas no dudéis en preguntarme ¡Animaros a prepararlo!